El superpapá y la supermamá al rescate de la niñez en Tamaulipas…
Fueron largos meses de sequía, el año más terrible en toda la historia del sur de Tamaulipas, en cuanto a escasez de agua, y por fin el cielo se apiadó de ésta, la tierra más sureña del estado, y de sobra: hay amenaza de inundación y hasta de desastre natural… así de extremo el asunto.
Entre una cosa y la otra: estiaje o sequedad semidesértica y aguas desbordantes como las que se pronostica, se atravesó el día del padre: celebración internacional del tercer domingo de junio que en Tampico, Madero y Altamira, sirvió de irónica válvula de escape para los habitantes del conglomerado urbano que lleva al menos tres décadas y un pico congeniando, simpatizando, pero sobre todo fantaseando, con un amigo imaginario que en otras partes del mundo sería enemigo.
A no ser, claro, que se trate de una película de Spielberg: el extraterrestre, al que hasta antes de la etapa más crítica de la sequía (cuyo fondo no se tocó, porque se seguía en caída libre buscando veneros más profundos) tenían como superhéroe, defensor y de “espantahuracanes” muchos lugareños en estos terruños, ser del imaginario colectivo al que ahora se llegó a despreciar, incluso en las horas que con mayor suspenso que los instantes previos al PREP se aguarda el impacto de “Alberto”, como se ha dado en llamar a la tormenta o ciclón tropical.
Un evento meteorológico que ha vuelto a sacar a relucir las cintas adhesivas en las cristaleras, ventanales y balcones de casas comerciales, edificios de oficinas y viviendas particulares de toda la conurbación, sin olvidar las escuelas, públicas o privadas que, desde este miércoles, están sin clases en esta región.
Los menores, niños y adolescentes, muchos de los cuales acababan de tener hace unos días suspensión de actividades intramuros o presenciales al estilo de la pandemia por causa de la ya tristemente célebre e histórica, esdrújula crisis hídrica, han sido enviados de nueva cuenta a refugiarse en el hogar, pero esta vez para descansar hasta nuevo aviso, y es justo ahí: en casa, donde salen al rescate de las criaturas el recién celebrado superpapá y la siempre activa y presente supermamá, para cuidar de sus bendiciones.
5 días de precipitaciones intensas es lo que se ha anunciado desde las autoridades en materia de protección civil: de aquí al lunes sin descanso para ellas, como no lo habrá para el paterfamilias y la jefa de hogar en tanto pase la tormenta… en tanto hace de las suyas el tan esperado, anhelado, temido pero también querido “Alberto”.