Desistieron de construir un muro que iba a cerrar la calle Divisoria y segregar a los habitantes de la colonia Luis Donaldo Colosio…
“Hola amigo, ¡dio resultado! No hicieron nada de barda, pudo más el clamor de la gente, ¡muchas gracias!”, nos dice el seguidor de nuestro medio y colono del área donde se unen Tampico y Altamira, Calixto Mar Gazpar.
Ello, respecto al desistimiento de una empresa inmobiliaria que iba a erigir un muro al final de la calle limítrofe entre los municipios de Altamira y Tampico, vialidad a la que se conoce como Divisoria y la cual quedaría cerrada para los automovilistas y motociclistas de esa forma.
Era específicamente al extremo poniente de la arteria, que en su lado tampiqueño lleva el nombre de Burton Grossman, donde se estaba ya comenzando a levantar la tapia la semana pasada, como nos lo hizo ver con imágenes testimoniales el informante.
Esta vez, él envió otras fotos en las que se puede observar el sitio libre del material que ahí había y de las armazones de varilla que habían sido colocadas sobre una zanja para cimentar y construir la referida barda.
Un muro que además terminaría apartando, segregando en toda la extensión de la palabra a quienes habitan la colonia Luis Donaldo Colosio, ubicada al otro lado del Libramiento Poniente, quienes, a pie o en bicicleta (los barandales de la autopista vedan el paso vehicular), atraviesan a diario de ida y vuelta justo ahí.
